La presidenta de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) hace un análisis sobre la situación actual de la profesión periodística en la clausura del sexto Máster de Periodismo Multimedia Profesional de la Universidad Complutense de Madrid (UCM)
“En esta sociedad acaparada por lo mediático, la información es, en sí misma poder y la debilidad de los periodistas afecta negativamente a la democracia”, ha afirmado Elsa González en un acto en el que ha amadrinado a la sexta promoción de alumnos del Máster de Periodismo Multimedia de la Complutense.
En esta situación, los políticos utilizan cualquier oportunidad para imponerse, sin olvidar que la industria de la comunicación ha comercializado con la política y con los políticos, los ha empleado para captar audiencia y ellos han aprovechado la debilidad de los medios para tratar de manipularlos y controlarlos. Por eso, aunque en una sociedad democrática políticos y periodistas están llamados a convivir, “la relación necesariamente tiene que ser conflictiva”, ha asegurado González, que ha recordado que desde la Federación de Asociaciones de Periodistas de España “venimos luchando contra las ruedas de prensa sin preguntas, los materiales enlatados o la aplicación de los bloques electorales”.
La presidenta de la FAPE ha destacado las múltiples presiones a que se ven sometidos los periodistas, provenientes del poder político pero también de la empresa en la que trabajan, de su director, redactor jefe o editor, de la lucha por la primicia o del “desatino de la inmediatez”. En medio de todo esto, ha dicho, el profesional debe buscar el equilibrio de acercarse a la verdad y eso requiere no sólo una sólida formación sino también honestidad intelectual y conciencia. “De poco sirve la especialización si no se aplica la ética”.
Actualmente, obligado a asumir un perfil multidisciplinar y trabajando con soportes masivos e instantáneos, el periodista deja en ocasiones que la velocidad se imponga a la confirmación y trabaja en una constante carrera contrarreloj “en la que no podemos apearnos de nuestro Código Ético. La FAPE se implica para reforzar la ética, a través de la autorregulación”, ha destacado Elsa González tras recordar el papel de la Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología del Periodismo como órgano de autocontrol deontológico interno de la profesión periodística.
Ante un nutrido número de alumnos, muchos de ellos procedentes de diferentes países latinoamericanos, y de la decana de la Facultad de Ciencia de la Información de la UCM, Carmen Pérez de Armiñán, que ha presidido el acto, la presidenta de la FAPE ha terminado su intervención asegurando que el periodismo es algo más que un oficio. “El periodista debe ser imparcial, pero no ser impasible. Su capacidad de denuncia forma parte de la misión periodística y tiene que pensar en el bien de la sociedad. Informar supone comprometerse con la justicia, la convivencia y la democracia”, ha concluido.